| al investigador Ryuzo Yanagimachi
quien clonó ratones en Honolulú, o al Colombiano Manuel
Patarroyo con la vacuna en contra de la Malaria. Frente a los dueños y editores de las revistas, los reclamos a la discriminación no tienen acogida, casi nunca serán publicables, ni como cartas al editor. LA CIENCIA SE LIGITIMA EN LAS PUBLICACIONES Si estamos conscientes de que los países del Tercer Mundo están discriminados en su ciencia, en sus revistas, en la preferencia de publicación y aun podemos ser presas de turbias utilizaciones de nuestros datos o proyectos, países como Brasil, Cuba, México, Argentina entre otros, han institucionalizado revistas científicas con reconocimiento mundial: constan en el índice de publicaciones periódicas, con referis y con alto nivel de sus trabajos, así han asegurado la originalidad de sus trabajos y la circulación mundial de investigaciones con importancia local y en muchos casos con ejemplo internacional. Ningún científicos que se precie, puede decir cual es el trabajo más o menos importante, aun cuando un trabajo científico no es reconocido en el momento de su publicación, puede serlo más tarde. En el Ecuador aun no existen revistas científicas indexadas, que al menos nos introduzcan en la internacionalización de la ciencia. De todas maneras, para que una investigación se legitime en el ámbito científico y académico, insalvablemente debe ser publicada, y aunque exista discriminación, lo ideal será publicar en una revista indexada, o un libro científico legalmente reconocido. Por todo lo expuesto, la presente obra trata en alguna medida de abrir un espacio a la comunicación científica rápida y de alto nivel de los trabajos de investigación nacional y a los investigadores que trabajando en condiciones de "vías de desarrollo", muchas veces producen conocimientos importantes, para aplicarlos tarde o temprano en los individuos aquejados de enfermedades originadas en el código de la vida: el ADN.
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